Un reciente estudio de la Universidad Rey Juan Carlos ha determinado el patrón de la biodiversidad de las zonas semiáridas, este ha sido desarrollado en su laboratorio de cambio global y ecosistemas semiáridos. Se trata del primer estudio que estudia la biodiversidad vegetal a nivel global. El trabajo ha sido financiado por el Consejo Europeo de Investigación (proyecto ERC Biocom) dentro del VII Programa Marco de la Comisión Europea y concluirá en 2015.

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Ademas este estudio se ha contado con la colaboración de distintos grupos de científicos de todo el mundo entre los que se encuentran los de las universidades de Berna, de Nueva Gales del Sur (Australia) o del Norte de Arizona (Estados Unidos).En este estudio se ha realizado un muestreo en todos los continentes, excepto en la Antártida.
Una de las consecuencias del cambio climático, según se apunta desde la comunidad científica, sera la conversión de las zonas semiáridas del planeta, que ahora se extienden por un 42% de la Tierra y en las cuales vive un tercio de la población mundial, se transformen en zonas áridas. Por ello se hace necesario establecer acciones que permitan detener esta tendencia, para lo cual es importante conocer cual es la base de su riqueza ambiental.
El trabajo realizado por este equipo internacional de investigadores, ha estudiado estas zonas semiáridas por todo el planeta y ha descubierto que existe un patrón a nivel global entre la presencia de árboles y arbustos, la biodiversidad y la fertilidad del suelo en estas zonas.
Las principales conclusiones derivadas del estudio han sido que cuando hay niveles intermedios de cobertura vegetal leñosa, la biodiversidad y una variable equiparable a la fertilidad del suelo son mayores. Sin embargo, las coberturas excesivas de vegetación leñosa pueden reducir estos niveles de biodiversidad y fertilidad del suelo, es decir, que a mayor homogeneidad de ecosistema la biodiversidad disminuye, haciendo a estas áreas más sensibles a los efectos del cambio climático y por lo tanto aumentando la probabilidad de que estas zonas semiáridas se transformen en zonas áridas.
Fuente: Universidad Rey Juan Carlos.
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