La Restauración Fluvial es el proceso donde se recupera las características hidromorfológicas de un arroyo o un río, mejorando así su integridad ecológica. Esta actividad tiene como objetivo recuperar el estado natural y el funcionamiento del sistema fluvial para promover la biodiversidad, gestión de crecidas, recreación y desarrollo del paisaje. A través del proceso de restauración se busca generar un régimen fluvial similar al régimen que existía antes de la intervención del hombre.
La restauración y mejora del curso del agua se puede expresar como la expansión del hábitat para diversas especies (insectos acuáticos, peces y otras formas de vida natural), y minimizar la erosión de las costas. Entre las mejoras también se cuentan la mejora de la calidad del agua (aumento de los niveles de oxígeno disueltos y reducción de los niveles contaminantes) y conseguir un régimen de flujo funcional sustentable que no requiera de la intervención del hombre periódicamente, tales como construcción de control de crecidas o degradas.

¿Cómo abordar un proyecto de restauración fluvial?
- Recuperar el territorio fluvial o gran parte del mismo. Es decir, recuperar el espacio para el río. En este tipo de actuaciones debemos apoyarnos en los datos históricos y fotografías.
- Implementar un régimen ambiental de caudales. Esta medida será importante en cualquier proyecto de restauración fluvial e idónea cuando se trate de mejorar o rehabilitar ríos regulados o que sufran algún tipo de alteración de su régimen natural.
- Limitaciones al desbordamiento y eliminación de barreras. Tanto las barreras transversales en el cauce, que puedan interrumpir la continuidad en el eje del cauce, como aquellas que impiden la conectividad del río con sus llanuras de inundación deben ser un objetivo claro en un proyecto de restauración.
- Establecimiento de bandas que protejan el cauce. Consiste en establecer bandas de vegetación de ribera en todos los bordes de los cauces cuya principales funciones son retener nutrientes y otras sustancias procedentes de terrenos agrícolas o de escorrentías de la infraestructuras (la vegetación actúa como filtros verdes de depuración) y retener sedimentos.
- Plantaciones de ribera. Aunque en un proyecto de verdadera restauración fluvial debería ser el río el que de forma natural restableciera las comunidades vegetales. Deben elegirse muy bien todas las especies y las formas de su plantación, así como destinarse recursos suficientes para el mantenimiento prolongado que pueda garantizar el éxito de las mismas.
- Rehabilitación de los tramos urbanos. En este caso, aunque hayamos renunciado a muchos de los objetivos de una verdadera restauración, es posible conseguir mejoras en los procesos y funciones naturales del ecosistema. Por ejemplo, facilitando la existencia de diversidad de micro-hábitats y zonas de refugio para diferentes especies de peces o invertebrados. Igualmente, potenciando la vegetación de los márgenes y el uso de especies autóctonas que imitan en la mayor medida posible la comunidad vegetal que existiría en el estado natural.
- Mejora de tramos canalizados. Esta operación de “maquillaje verde” de estructuras altamente impactantes puede obtener una importante mejora en la biodiversidad que alberguen estos tramos y en la propia calidad del agua.
Hola, Apenas despierto aunque siempre me he preocupado.
Pero hay que empezar ya porque todo los arroyos están secos.
Pero creo que todavía se puede
Hay más ideas que podemos aportar
Estupendo artículo
Me interesa la recuperación del recorrido auténtico de sus aguas. Por que los dueños de los terrenos se ampliaron de acuerdo a sus intereses y hoy por ser quebradas quieren hacer uso para carreteras desbordando las aguas a un más
Pueden ayudarme ya que el río que pasa en mi comunidad lo están acribillando con saqueos de arena y graba y ya está secándose y solo cuenta ya con un 10 por ciento del agua q corría antes sobre el es el río de santa María colotepec Pochutla Oaxaca y ninguna autoridad ni Conagua hacen por ayudar que se puede hacer.