Con este juego de acrónimos utilizados para referirse a los Sistemas de Información Geográfica tanto en español como en inglés, SIG y GIS, quiero reivindicar el diferente valor que se le dan a estas maravillosas tecnologías en los Estados Unidos y en España. Pese a vivir en un mundo en el que la información y la difusión de los conocimientos son procesos globales, es decir, que somos conocedores del potencial de estas herramientas por los ejemplos que vienen de fuera, el apoyo al desarrollo y divulgación de estas tecnologías por parte del gobierno deja mucho que desear siendo como son, unas herramientas clave para la sostenibilidad del territorio y las sociedades que lo habitan.
Si bien cada vez es mayor el número de aplicaciones directas de los SIG, como diferentes son las disciplinas que los utilizan, en España una vez más vamos a remolque debido en gran parte a la escasa introducción de estas tecnologías en la educación académica y en la formación de futuros profesionales. Y aunque grandes son los avances y tecnologías que han intentado acercar estos mundos, como es el caso por ejemplo de «GVSIG Educa» (o el antecesor uruguayo «GVSIG Batoví»), la brecha que nos separa con los EEUU es enorme.
Recientemente, el gobierno de Estados Unidos ha invertido miles de millones de dólares en educación geoespacial con el fin de garantizar el futuro de los GIS en el proyecto «iGETT» (Integrated Geospatial Education and Technology Training), un proyecto originado en 2007 por la Fundación Nacional para la Ciencia, la NSF. Estos fondos están destinados a desarrollar un conglomerado de profesionales que sea capaz de utilizar y gestionar la información geográfica con el fin de resolver los problemas locales, nacionales y globales.
Para cumplir esta misión, el gobierno federal se ha apoyado en los profesores de los «community colleges«, que vienen a ser como institutos o academias pre-universitarias de dos años, mucho más flexibles que las universidades en sus programas y que atienden a una población muy diversa. En principio, los datos utilizados para trabajar la formación y resolver los problemas geoespaciales, serán de instrumentos que observan la Tierra desde arriba, siendo los satélites LANDSAT los que ofrecen el registro más largo del mundo de la superficie terrestre del planeta. El iGETT prepara a los profesores, y les proporciona una serie de recursos entre los que se incluyen videos, laboratorios en las aulas, talleres, lecciones educativas de teledetección, y una comunidad en red de líderes en la educación geoespacial para que puedan comprender, analizar y utilizar los datos de los satélites LANDSAT para la resolución de problemas geoespaciales, con el fin último de transferir todos estos conocimientos y destrezas a sus alumnos y capacitarles en el uso de las herramientas GIS.

El proyecto iGETT ha contribuido mucho para reducir la brecha entre los GIS y la educación pública y privada en los Estados Unidos, con el objetivo de asegurar el liderazgo del país en el desarrollo y avances en la investigación y la observación geoespacial. Bajo el paraguas del iGETT, una amplia gama de iniciativas patrocinadas por el gobierno han dado cabida a un mayor aprendizaje GIS, como por ejemplo el Centro de Excelencia en Tecnología Geoespacial y el desarrollo de un plan de estudios para un curso modelo en Teledetección.
En España, por el contrario, todos somos conocedores del retroceso general en el apoyo a la investigación por parte del legislativo de los últimos años y si nos ceñimos al mundo de los Sistemas de Información Geográfica, el apoyo a esta disciplina es prácticamente nulo. En cambio, en los últimos 5 años, los posgrados universitarios enfocados en la formación de especialistas y profesionales en SIG se han multiplicado. Prácticamente en casi todas las universidades de capitales de provincia tienen ya posgrados en SIG, todo ello marcado por una visión de futuro que cómo siempre se percibe antes en los círculos académicos y universitarios, que en la propia administración. La formación SIG está de moda. El presente y el futuro necesita profesionales de distintos ámbitos con formación en SIG y técnicos especializados en los Sistemas de Información Geográfica, dos cosas distintas, no lo olvidemos. No creo tampoco necesario que ahora todo el mundo se saque un Máster en SIG al uso, pero sí quizás que los distintos profesionales del territorio y del medio ambiente se vayan formando en el uso de estas tecnologías para aplicarlas en su trabajo y no quedarse descolgados de las nuevas tendencias.
Ahora sólo cabe esperar un cambio de tendencias en las políticas educativas lastradas todavía (aún más si cabe con los útimos cambios legislativos sectoriales) por factores industriales fordistas y religiosos, y enfocarlas a los nuevos cambios sociales, ambientales y procesos productivos en los que los SIG están cobrando cada vez mayor importancia. ¿Creen uds. que esto será posible? Ahí les dejo la pregunta…
Y eso que es Europa, aquí en America Latina especificamente en México estamos igual de atrasados y no se diga en el caso de los SIG libres apenas y hay una pequeña luz en ese tema.