“El territorio es una condición muy compleja y que es de hecho una capacidad. No es sólo tierra” Saskia Sassen
El entender el enfoque del desarrollo territorial implica integrar tres elementos que son claves en su estructura de análisis, como son: el concepto del desarrollo, que tal como lo hemos venido analizando debe ser entendido como una postura diversa desde lo cultural; el territorio visto como un crisol de acciones humanas que dotan de un carácter social especifico al espacio físico ocupado por las personas y; finalmente, hay que considerar un entendimiento sistémico de las acciones humanas con el entorno sobre el cual se ejercen dichas acciones humanas.
Las sinergias que se activan entre estos factores de desarrollo territorial, son la base sobre la cual se vertebra la visión prospectiva de las acciones humanas y de los impactos que estas generan; este proceso requiere, entender la profunda vinculación entre el ser humano y el entorno natural sobre el cual ejerce.
Estas interacciones entre hombre y naturaleza generan transformaciones entrópicas que de ser realizadas de una forma espontánea, producirían deterioros en el hábitat construido en el mediano y largo plazo; es a partir de esta disyuntiva en donde reside el núcleo central del enfoque sistémico del desarrollo territorial, al considerar que toda acción humana debe ser siempre consciente de los impactos que genera en otros ámbitos territoriales (social, económico, ambiental, cultural, entre otros) y los respectivos condicionamientos que puede generar a la sostenibilidad local y global.
Autor: Jorge Amaya Ruiz
Esa ilustración de los cuatro componentes del desarrollo territorial sostenible es de su autoría?, ¿puedo usarla? por supuesto citando apropiadamente
Estimado Héctor, gracias por leer el articulo y sobre el interés de la figura, y claro que puedes hacer uso de ella si te es de utilidad.
Saludos
Jorge Amaya